Hace más de 50 años, danzas y disfraces han venido alegrando al Carnaval de Barranquilla  con su creatividad,  empeño y propuestas culturales.  Ellos han mantenido su esencia a través de los años y, a pesar del modernismo, fluyen por sus venas  las raíces del carnaval.

Gracias a ellos somos Patrimonio Intangible de la Humanidad, por eso el Carnaval se ha comprometido en salvaguardar, reconocer y estimular la participación de estos grupos folclóricos que hace más de medio siglo portan la tradición de nuestra fiesta.

¿Quiénes son?

El Torito Ribereño

Fue conformada en  la década de los 70 por un grupo de hombres que fueron rechazados por la danza El Toro Grande, por ser  muy jóvenes. El Torito Ribereño  ha ganado hasta el día de hoy 11 Congos de Oro.

Congo Grande de Galapa

Sus integrantes iniciales eran campesinos que se disfrazaban de forma individual de Congo. Participaban únicamente en los carnavales de Galapa y,  en 1902, luego del conflicto de la Guerra de los Mil Días que afectó al país, conformaron un grupo llamado Congo Grande de Galapa, que se mantiene vigente  en nuestro carnaval.

Cumbiamba El Cañonazo

El Cañonazo  proviene inicialmente de la propuesta de los esposos Luis y Natividad Altamar, quienes crearon una cumbiamba con los niños de su barrio, a esta la llamaron Las Zardas del Barrio Boston. Con el pasar del tiempo el grupo fue evolucionando y luego, en 1964, cambiaron su nombre a Cumbiamba El Cañonazo. Desde ahí han mantenido su nombre y su sabor en el Carnaval de Barranquilla.

Las Ánimas Rojas de Rebolo

El grupo de llamó inicialmente El Capuchón Negro. Su creación data de 1930 cuando José Dolores Gutiérrez, Isaac Morón y sus amigos decidieron escribir unos versos y cantar versos picantes para recoger dinero y seguir comprando ron.  El grupo siguió reuniéndose todos los años para continuar con la tradición y rebuscarse económicamente. Años más tarde cambiaron su nombre a Las Ánimas Rojas de Rebolo en honor  a los liberales y a Jorge Eliécer Gaitán.

Los Cabezones

La historia se remonta a 1930 cuando el  empresario Celio Villaba Rodríguez  viajó a Alemania y observó en sus carnavales unas personas disfrazadas con cabezas gigantes, y, al llamarle mucho la atención, decidió crear un grupo igual para el Carnaval de Barranquilla.

Danza Paloteo Mixto

La danza del Paloteo fue creada en 1916 solo para hombres, pues representaba a una danza guerrera masculina, pero la historia cambió gracias a Ángel Custodio, quien, en 1936 decidió crear su propio grupo de paloteo donde las mujeres tenían permitido participar. De ahí el nombre Danza Paloteo Mixto.

Disfraces La Gigantona

En 1948 el joven Jorge Altamiranda le pidió ayuda a su papá para hacer un Joselito Carnaval gigante,  Se ganó el Congo de Oro. En 1949 sacó un Rey Momo gigante y volvió a triunfar.

Luego la Cervecería Águila lo llamó y le ofreció un contrato de publicidad con la condición de que en vez de muñecos fueran dos muñeconas gigantes que llevaran el aviso de la popular cerveza. Así nacieron en 1950 Las Gigantonas de Jorge Altamiranda.

Disfraz El Descabezado

Ismael Escorcia Medina creó el Disfraz El Descabezado como un homenaje a Gaitán, a las víctimas de la violencia y a los muertos de la masacre de las bananeras. Él mismo diseñó el disfraz y apareció por vez primera en el Carnaval en 1954.

Indios E Indias De Trenza Chimila

Es una danza de tradición familiar, fue fundada por Dilia Meléndez en 1935. Es una representación de los indios Chimilas. En 1945 comenzó a ser dirigida por Dora Thomas y, en la actualidad cuenta con 40 participantes.

Danza El Imperio de las Aves

El 7 de febrero de 1930 Pedro Barreto y Pedro Berdugo, vendedores de plátano, estaban recordando los vistosos pájaros que habían visto en su niñez en el campo, gracias a eso decidieron conformar con sus amigos del mercado y familiares la danza  a la que  llamaron Los Pájaros. En 1954 su nombre cambió a El Imperio de las Aves, como es conocido  actualmente.